A través del espejo

Escribí el otro día que no tardaría tanto en volver a pasar por aquí y efectivamente así ha sido. Esta noche he soñado. No acostumbro a recordar los sueños y menos a escribir sobre ellos pero el de hoy ha sido especial y me ha recordado a otro que tuve hace ya muchos años, mientras opositaba.
Esta noche una tormenta había arrasado una ciudad como me siento yo ahora, con todo alrededor patas arriba. Creo que es una metáfora. Al contrario, hace unos 10-15 años soñé que estaba escalando una cascada y llegué arriba. Eso fue unos días después de haber aprobado mi primer examen de registros. Realmente eso era una cascada!!! porque luego todo cayó como el agua pero relaciono dos sueños extraños en dos momentos vitales diferentes entre sí pero significativos. Hace unos años me sentía realizada; ahora, al contrario, todo está arrasado y nadie lo reconstruirá.

Y por algún motivo que desconozco mi subconsciente me ha traído a la memoria dos recuerdos, también dispares en el tiempo pero con algo en común aunque nada tienen que ver con el sueño… Hace años estaba en urgencias y había una pareja de gente mayor; él la abrazaba y yo sentía que ese abrazo era para mí, como si lo estuviese sintiendo en mi piel… hace unos pocos días, mientras esperaba en el coche, dos jovencitos se abrazaban en la acera mientras se besaban apasionadamente. Otra vez volví a sentir lo mismo de aquella vez: el beso y el abrazo, ya que los estaba viendo, eran para mí. Entre sueños y subconscientes anda la cosa… feliz fin de semana!

Vaya, cuánto tiempo sin pasar por aquí. La verdad es que mi blog ha caído casi en el baúl de los recuerdos o en el site del olvido.
No es que no tenga cosas que contar; es que me las explico a mí misma últimamente.
Ya hace meses que me siento extraña, no sólo por el tema salud sino por tener esa rara sensación de haber dejado mi vida en stand-by para volver a iniciarla más adelante aunque yo sé que no es así.
Necesito cambios; no alocados sino organizados. Necesito alejarme de esta isla que me apretuja y volver a disfrutar de un ambiente rico en estímulos. La cuestión es si el trabajo no me lo permite, ¿cómo lo voy a hacer? Si fuese hippy lo tendría más fácil; simplemente desaparezco y ya volveré o no pero como no lo soy, tengo que intentar organizar desde la nada. Y la nada, a menudo, aterra.
De momento, a dedicarme a la UOC. Es divertido esto de volver a estudiar. Las nuevas tecnologías son una auténtica maravilla; pensar que hace casi 20 años que acabé en la universidad y ahora ya nada es igual. Bueno, algo sí, sigue siendo necesario memorizar pero ahora ya no hablo de ius ni de «nihil volitum nisi praecognitum» sino de abreviaturas como PCPA -para-cloro-fenilalanina- si no recuerdo mal y otras similares, AMPAs sin que tengan que ver nada con asociaciones de madres y padres de alumnos, etc… En la variedad está el gusto, así que a variar ahora que se puede… buenas noches y espero volver antes de que pase mucho tiempo.