EMAG: c´est fini…
Posted on agosto 16th, 2016 by henriettaPosted in Sin categoría | No Comments »
Hace días que no paso por aquí, muchos, demasiados…
Eso tiene una lectura positiva: no necesito escribir para entenderme y una mala: apenas me queda tiempo para pensar… El trabajo, cambios de vida… todo corre o directamente vuela.
De todos modos, el EMAG se merece un punto y aparte y unas líneas.
Fue genial. Me he acostumbrado a esta familia atípica y tan numerosa, que de pequeña soñaba y les ponía nombres a todos, que se parecen muy mucho a los de los miembros de esta gran familia tan poco ortodoxa: Maureen, Gwendoline… En fin, que Mensa en su lectura positiva es una maravilla; en su lectura cachonda es 50% positiva y en su lectura de problemas personales podría mejorar pero eso de puntillas, que en el EMAG apenas se aprecia. Sólo de vez en cuando algún disconforme te cuenta sus panaceas pero le dedico poco tiempo.
Un pequeño mundo hecho de Jims, Madalyns, Iris, Jörgs, Nellekes y Bennos que llenan las horas del día y de la noche con anécdotas de lo más variado y pinceladas de culturilla y diferencias culturales grandes a menudo.
Digamos que Cracovia es una ciudad bonita, limpia, silenciosa, sin complicaciones. Difícil perderse y con este aire de ciudad del este que se repite en Praga, Bratislava… y que sólo Viena para mí supera.
Ha sido, en definitiva, un bonito viaje, entrañable, con anécdotas curiosas y algunas sorpresas; con personas nuevas a las que seguir durante el año en sus correrías y sobre todo de reencuentros con personas a las que hacía tiempo que no veía o que vi, incluso, una sola vez pero que tienen sus toques humorísticos, como Ella, que hacen que sea difícil olvidarlas; de pérdidas, como Charles Bruce, que se fue al otro barrio y por eso no contestaba mis emails…
En fin, hay que ir a Cracovia a vivirla y al EMAG a conocerlo ni que sea una sola vez. Para los solitarios diría que estas familias «adoptivas» son de lo más recomendable y enternecedor. Encontrar personas que sin interés alguno te iluminan la mirada con sus piropos; ya sólo por eso vale la pena.
El año que viene no hay viaje de EMAG. El EMAG viene a casa aunque no sea navidad sino agosto. Habrá que buscar alternativa. De momento, creo que el American Gathering puede ser un bonito sustituto ni que sea por una sola vez, por ver cómo se ve esta familia al otro lado del charco: de tamaño gigantesco seguro y reencontrar a algunas personas que no lo cruzan cada año para venir… quien sabe si después me atrevo con Australia… Feliz final de verano!