A través del espejo

Anoche tocó estrenar la temporada de teatro. Realmente el estreno fue exitoso. Me encantó ver como una sola actriz puede llenar el escenario con la simple ayuda de un acompañante tocando la guitarra. Si empieza así, espero que significa que promete lo que vendrá. De momento, en un par de días Carme Conesa con Las amistades peligrosas, historia por demás sabida pero que al menos a mí nunca me cansa, como, en general, todos los clásicos. Una gozada… pero antes toca concieto de piano la semana próxima. A ver qué tal porque ni conozco al intérprete y eso, a veces, significa cierto riesgo y a mí no me gusta tirar el dinero sino apostar por las cosas seguras… en breve sigue la crítica. De momento, a sobrevivir la próxima semana.