¿El hombre es el único animal…?:
Posted on octubre 28th, 2007 by henriettaPosted in Columnas | No Comments »
Se dice que: “El hombre es el único animal que tropieza dos veces en una misma piedra”. Si no pensamos demasiado en el significado de esta frase, tal vez, coincidiremos en que es cierto lo que afirma. Sin embargo, si empezamos a darle vueltas a la cuestión, concluiremos que no siempre es así.
Sin más, en primer lugar, hay que tener en cuenta que sí es probable que, en ocasiones, tropecemos con experiencias con las que antes ya nos hemos enfrentado y que, si bien no van a ser exactamente como fueron o como las recordamos, en cierto modo, nos recuerden hechos por los que ya hemos pasado. Hasta aquí, no existe duda alguna que hay eventualidades que se escapan al control humano y no podemos decidir vivirlas o no porque, simplemente, nos encontramos inmersos en ellas sin poder evitarlas.
No obstante, también es cierto que aun enfrentándonos a situaciones similares a otras vividas, la inteligencia humana sirve para evitar las mismas consecuencias que un hecho tuvo en el pasado. Pensemos, así, en un divorcio. Es cierto que la inmadurez, a veces, provoca consecuencias indeseables que, si se hubiese tenido una segunda oportunidad, tal vez, no habrían ocurrido. ¿Habremos escuchado alguna vez a alguien lamentarse de que era demasiado joven cuando le ocurrió esto o lo otro? Es probable. En este caso, lo que se encierra es el pesar por no haber tenido una segunda oportunidad.
A lo mejor, así, no habría ocurrido lo mismo. Pero, como la vida está llena de sorpresas, nadie nos dice que no exista esta segunda oportunidad aunque sea vivida como una experiencia distinta: otro lugar, otra persona… Será, en este caso, cuando nos podremos dar cuenta que no siempre el hombre tropieza dos veces en la misma piedra. Puede ocurrir, ciertamente, que ante una misma situación, la reacción sea totalmente distinta a la anterior y, así, evitar un nuevo tropiezo.
¿Cuántas personas habrán tenido esta segunda oportunidad de demostrarse a sí mismos que lo que en un momento fue una decisión equivocada les ha permitido madurar y salvar, así, situaciones que de otro modo no habrían demostrado la calidad humana de que todos disponemos?
Nunca deberíamos dar por sentadas estas premisas que se nos presentan como “incuestionables” sin antes analizar si es cierto o no lo que nos pretenden hacer creer.