Noticias curiosas CLXIX:
Posted on mayo 5th, 2010 by henriettaPosted in General | No Comments »
Y otra noticia curiosa nos dice que: Las velas de la Catedral de Santiago se digitalizan:
La catedral de Santiago de Compostela ha incorporado un nuevo sistema de encendido de lampadarios que permite prender velas digitales a través de una página web específica y teléfonos fijo y móvil, previo pago.
El proyecto, ideado hace dos años por la empresa Candeum, ha desarrollado lampadarios físicos, similares a los tradicionales, que incorporan una pantalla sobre la que se ven dibujadas velas. Una vez que se ordena el encendido de la vela, por un precio de 1,39 euros, IVA incluido, el objeto se ilumina.
Este nuevo sistema permite encender la vela desde cualquier parte del mundo a través de internet, o mediante un mensaje de móvil.
Y otra noticia curiosa nos dice que: Paris Hilton entierra a su cabra junto al nicho de Marilyn Monroe
Los caprichos de los ricos y famosos suelen hacer las delicias de aquellos que disfrutan de las historias ajenas. Ahora el periodista David Escamilla ha recopilado en un libro algunas de estas extravagancias derrochadoras reflejo de que una abultada cuenta corriente no siempre es sinónimo de buen gusto.
«Anécdotas de millonarios» (Cúpula) ofrece una somera selección de estas excentricidades, que según deja entrever el autor daría casi para una enciclopedia del malgasto, en la que la mediática París Hilton ocuparía un lugar de honor.
Más allá de su afición a los saraos… En uno perdió su suculenta agenda, repleta de famosos que vieron luego sus teléfonos colgados en internet- de la biznieta del fundador de la cadena Hilton, Escamilla destaca su adoración por los animales, un cariño que le llevó a pagar una suma extraordinaria para comprar un trozo de tierra junto al nicho de Marilyn Monroe para enterrar…a su cabra.
Otra conocida compradora compulsiva es Victoria Adams, la Beckham. Escamilla relata cómo esta mujer es capaz de gastarse en una tarde de aburrimiento 350.000 euros en ropa y algunos complementos: como veinte pares de zapatos Dolce&Gabana, doce pares de gafas Versace o un Rolex.
El recientemente fallecido rey del pop Michael Jackson fue indudablemente un genio de la música, pero según explica el autor del libro la sobriedad no estaba entre sus virtudes. Muchos hubieran pagado por haber paseado por su rancho de Neverland en sus momentos de esplendor -un verdadero Xanadú de la estridencia- donde las momias egipcias, de las que poseía varias, se mezclaban con las estatuas de piedra de los personajes más populares de Walt Disney que decoraban los jardines, combinadas con escenas de la Biblia.
David Escamilla no se olvida en este recopilatorio del derroche abusivo del productor Aaron Spelling -alma mater de series míticas como «Los ángeles de Charlie» o «Dinastía»- y propietario de una de las mansiones más increíbles de Beverly Hills, un lugar donde precisamente hay muchas mansiones increíbles.
La suya tenía 123 habitaciones, una bolera, una pista de patinaje sobre hielo, un jardín de rosas en el techo del garaje y dos habitaciones exclusivamente destinadas a envolver regalos.
Aunque Escamilla hace especial incidencia en los ricos manirrotos, el libro incluye un apartado para los que a pesar de sus inmensas fortunas vivían mirando cada céntimo que gastaban, como el magnate del petróleo Jean Paul Getty (1892-1976), una de las primeras fortunas en superar los 1.000 millones de euros y que instaló teléfonos con monedas en su propia casa para las visitas.
Inevitablemente, el lujo asiático tenía que contar con un capítulo propio, y con un protagonista en particular, el príncipe de Brunei, que desde hace una década mantiene un litigio judicial con su padre y hermano, por una cantidad de dinerillo apropiada, al parecer, de forma indebida, señala el autor, unos 14.800 millones de dólares.
Si en vida hay ricos maniáticos, con su muerte otros no se quedan atrás. Están los que quieren que sus cenizas vuelen en el espacio, el típico que deja su fortuna al perro o quien la lega a su viuda, siempre y cuando se vuelva a casar, como dejó en su testamento el poeta alemán Heinrich Heine (1797-1856). «Al menos así habrá un hombre al que le pese mi muerte», expresó como voluntad
Otra noticia curiosa dice: Tengo un alien en mi estómago
A una mujer le extraen 29 bolas gelatinosas de procedencia desconocida del estómago.
Los médicos de un hospital de Taiwan aún no dan crédito del descubrimiento que hicieron al realizarle a una mujer una radiografía del estómago. Los médicos descubrieron unas extrañas bolitas que llenaban los intestinos de la mujer. Tras ver las radiografías decidieron realizar una operación para extraer aquel cuerpo extraño y se sorprendieron al sacar 29 bolas gelatinosas, de procedencia desconocida, de los intestinos de la paciente.
Y otra noticia más que sorprendente nos dice que: Un ladrón arrepentido devuelve 11.000 euros en Brasil
Un cerrajero brasileño devolvió el jugoso botín de 26.000 reales (unos 11.000 euros) un día después del robo.
El ladrón, de 30 años, fue detenido en Nueva Lima, a 15 kilómetros de Belo Horizonte (capital del Estado de Minas Gerais al sudeste), tras haber dejado el dinero en la puerta de una casa vecina.
El miércoles, el cerrajero asaltó la casa de un comerciante sin forzar las puertas. Al momento de huir, el ladrón fue identificado por una vecina pero la Policía no consiguió detenerlo.
Arrepentido, el jueves el ladrón regresó al lugar, devolvió el dinero y fue detenido por la policía.
Y nuestra última noticia curiosa también va de robos. Dice: Entraron a robar a la cárcel:
Por segunda vez en los últimos meses una cárcel fue asaltada. Los ladrones se llevan los televisores de los presos.
Ocurrió en la cárcel de mínima seguridad de Hoorn, en Holanda, donde los presos pueden salir los fines de semana. Este centro de detención es un ‘ambiente modestamente protegido’ en el que los prisioneros hacen la transición de regreso a la sociedad.
Un grupo de ladrones aprovecharon la ausencia de los detenidos para entrar a las celdas y llevarse los aparatos de televisión. Según un portavoz del Ministerio de Justicia no se sabe de qué manera entraron los ladrones ni cómo se llevaron su botín.