A través del espejo

La respuesta rápida sería «muchas cosas».
Una respuesta más detallada distinguiría varios puntos.
En primer lugar, estoy contenta. Me siento feliz en el trabajo; tengo un hogar tranquilo y pequeñito pero no necesito más.
Me siento en paz conmigo misma.
Las guerras vienen de fuera pero no siempre duran mucho.
En segundo lugar, estoy en una fase vital «rara», como otras tantas. Seguramente ya no me siento muy joven ni muy mayor pero ciertos achaques que me dejan patidifusa no me permiten tener la tranquilidad de espíritu que necesitaría o será al revés: necesito más tranquilidad de espíritu y entonces desaparecerán los achaques?
Sea como sea, habrá que experimentar.
El verano toca a su fin. No podría resumir en unas líneas lo que ha dado de sí: Florida, EMAG, Ibiza… más valen las fotos que hablan por sí mismas.
Aún queda un breve paseo por Europa antes de acabar el año. Esperemos que entretenido porque llevo años esperándolo, después de la recomendación de una persona de cuyo buen gusto no me cabe duda alguna.
Este invierno volveré al Liceu después de 14 años sin pisarlo, después de una decepción sonora. Esperemos que la dicha sea buena.
¿Qué más quedará por venir? Esperemos que algo de felicidad para que el espíritu esté tranquilo.
Feliz rentrée!

Tantas cosas tengo que contar que dudo que sea capaz de hacerlo en una sola vez. Al menos lo intentaré ni que sea de forma telegramática.
Número 1.- nuevo trabajo. Bien. Me gusta. Ahora tengo que ser yo quien esté a la altura y les guste… estoy en ello.
Número 2.- casa nueva. Bonita, cómoda y tranquila, como a mí me gusta. Pero, como siempre hay un pero, carísima… qué le vamos a hacer. ¿Alguien dijo que la vida es perfecta?
Y estamos en 2017. Hace más de medio año que no paso por aquí. Bueno, realmente, no hace tanto pero el hacker se encargó de estropear mis buenos deseos de año nuevo. Será grave el día que no tenga ni tiempo de desear para un nuevo año lo mejor a todos sin excepción alguna.
Por lo demás, la vida sigue. Es éste un año de cambios, espero que en positivo. Un año en que el pasado se resiste a salir de mi vida; un año en que sigo aprendiendo tantas cosas… La psicología me fascina. No me puedo quejar. Al menos ya que me sale carísimo, lo disfruto, que no es poco.
Y por hoy mi regreso es breve pero deseado de veras. Echaba de menos mi página de confidencias. Buenas noches, qué sueño! A reveure.

Hace días que no paso por aquí, muchos, demasiados…
Eso tiene una lectura positiva: no necesito escribir para entenderme y una mala: apenas me queda tiempo para pensar… El trabajo, cambios de vida… todo corre o directamente vuela.
De todos modos, el EMAG se merece un punto y aparte y unas líneas.
Fue genial. Me he acostumbrado a esta familia atípica y tan numerosa, que de pequeña soñaba y les ponía nombres a todos, que se parecen muy mucho a los de los miembros de esta gran familia tan poco ortodoxa: Maureen, Gwendoline… En fin, que Mensa en su lectura positiva es una maravilla; en su lectura cachonda es 50% positiva y en su lectura de problemas personales podría mejorar pero eso de puntillas, que en el EMAG apenas se aprecia. Sólo de vez en cuando algún disconforme te cuenta sus panaceas pero le dedico poco tiempo.
Un pequeño mundo hecho de Jims, Madalyns, Iris, Jörgs, Nellekes y Bennos que llenan las horas del día y de la noche con anécdotas de lo más variado y pinceladas de culturilla y diferencias culturales grandes a menudo.
Digamos que Cracovia es una ciudad bonita, limpia, silenciosa, sin complicaciones. Difícil perderse y con este aire de ciudad del este que se repite en Praga, Bratislava… y que sólo Viena para mí supera.
Ha sido, en definitiva, un bonito viaje, entrañable, con anécdotas curiosas y algunas sorpresas; con personas nuevas a las que seguir durante el año en sus correrías y sobre todo de reencuentros con personas a las que hacía tiempo que no veía o que vi, incluso, una sola vez pero que tienen sus toques humorísticos, como Ella, que hacen que sea difícil olvidarlas; de pérdidas, como Charles Bruce, que se fue al otro barrio y por eso no contestaba mis emails…
En fin, hay que ir a Cracovia a vivirla y al EMAG a conocerlo ni que sea una sola vez. Para los solitarios diría que estas familias «adoptivas» son de lo más recomendable y enternecedor. Encontrar personas que sin interés alguno te iluminan la mirada con sus piropos; ya sólo por eso vale la pena.
El año que viene no hay viaje de EMAG. El EMAG viene a casa aunque no sea navidad sino agosto. Habrá que buscar alternativa. De momento, creo que el American Gathering puede ser un bonito sustituto ni que sea por una sola vez, por ver cómo se ve esta familia al otro lado del charco: de tamaño gigantesco seguro y reencontrar a algunas personas que no lo cruzan cada año para venir… quien sabe si después me atrevo con Australia… Feliz final de verano!

Hello world!

Vaya, vaya… principio de año… digamos que si 2015 fue poco «escribidor», 2016 empieza siendo curioso. Veremos cómo acaba. De momento, me he estrenado como autónomo pero a medias, es decir, sin poder cambiar mi colegiación de momento, así que eso, a medias.
Por otra parte, en mi búsqueda de un caminito nuevo por el que andar he dado con una persona curiosa cuanto menos. En unos días sabré si ha sido un encuentro casual o sí, realmente, una especie de «guru» se ha cruzado en mi camino… más noticias en breve.
En paralelo, otras ofertas aparecen pero hay que decantarse por alguna si puedo elegir y en ese caso, está claro qué voy a escoger ;-).

Hoy es Nochebuena un año más. Este ha sido para mí un año muy raro y sigue siéndolo y además tengo la sensación de que es el primer año raro de muchos más raros que están por venir, o no.
No voy a hacer balance del año. Realmente no vale la pena. No voy por ahí. Mi intención es mucho más mundana y empieza por esta pasada noche en que soñé que me habían invitado a una boda. Iba superarreglada y cuando llegaba al banquete nadie me quería en su mesa. Todas las mesas estaban completas aunque cuando yo llegaba había un plato vacío pero reservado para alguien. ¿La lectura? Pueden ser tantas… me he apuntado a tantas ofertas de trabajo y en todas me han rechazado; no se me pasa por la cabeza el tema pareja porque las pocas veces que me he enamorado, han acabado en desastre… No creo que vaya sólo por ahí tampoco sino por una sensación global de falta de adecuación, de estar en una vida equivocada o simplemente que la vida me ha atropellado y atropellada me he quedado, como el cisne entre patos, que he vuelto a ser después de haber encontrado muchos cisnes en el camino…
Lo que sí he descubierto es que la canción no engaña: en la vida hay tres cosas importantes: salud, dinero y amor. Siempre las había presupuesto en una pirámide con salud a la cabeza, dinero en el plano intermedio y el amor en la base y, sin embargo, he llegado a la conclusión de que no es así: están las tres tremendamente vinculadas. Si no hay amor, no hay trabajo y sin trabajo, no hay salud. El amor no entendido como una pareja amorosa que se desvive por nosotros sino como los pequeños gestos cotidianos que nos hacen sentir bien; la comprensión y empatía son también formas de amor. El dinero viene del trabajo y sin amor, no hay trabajo porque si no te aprecian en el trabajo, lo pierdes y los celos son una fuerza mucho más poderosa que el amor, al menos por lo que he podido comprobar. Finalmente la salud se construye de amor y dinero. Si no sientes el suficiente amor para no ser odiado ni ganas lo suficiente para poder vivir dignamente el cuerpo y la mente se deterioran hasta acabar con una porque simplemente el sufrimiento gana a la alegría y la balanza se desmorona. Esa es la conclusión que he extraído de 2015. A partir de aquí, veremos cuánto tarda en desmoronarse este edificio que es el cuerpo y el alma cuando se siente marchito y sin apoyo. El cisne que perdió a los otros cisnes y está entre patos necesita volver a encontrar a sus semejantes cisnes para no acabar siendo el patito feo.
A pesar de todo este halo invisible que es la navidad lo impregna todo con su manto y por unos días nos señala con su luz que hay algo más que la rutina cotidiana, que la imaginación y la ilusión están ahí para hacernos trascender la realidad. Casi podemos decir, FELIZ NAVIDAD!!!

Esta noche he vuelto a soñar lo mismo que hace unos días pero en otra versión, claro. Soñar lo mismo sería muy aburrido.
Anoche soñé que un maremoto invadía la isla. A mí no me pasaba nada; sólo que no podía ducharme por temor a que el agua saliese sucia o a borbotones con la que estaba cayendo… Más o menos lo mismo que hace unos días. En esta ocasión, tampoco me ocurría nada como si el peligro fuese siempre más para los otros que para mí misma.
Sin tiempo a darle muchas vueltas, me he ido a hacer análisis, los novenos de este año. Esperemos que salgan bien.
Aguardando saber si sale bien la oferta de trabajo o no, parece que la previsión astrológica para la semana próxima, que es cuando sabré la respuesta, no es muy positiva pero, en fin, paciencia, a ver qué ocurre. Las cosas importantes que nos pasan en la vida pocas veces las elegimos nosotros sino otras personas ignorando, a veces, lo importantes que son en nuestro futuro y para nuestro desarrollo personal. Sorpresa; por una vez podría resultar positiva.
Por otra parte, hoy es día de entrega en la UOC como lo fue el lunes. Me está gustando este sistema, la verdad. Veremos los resultados a la vuelta de la esquina, que enero llega rápido y entonces es cuando hay que sentarse y escribir lo que se retiene en la cabecita… tantos nombres “raros”, que para un médico o un biólogo serán de lo más normal pero a mí me siguen sonando un poco a chino aunque las reglas nemotécnicas, de vez en cuando, funcionan. De momento, ya me acuerdo de los núcleos dentado-emboloide-fastigio y globoso, que no goloso, así que por algo se empieza: DEFG. Arrivederci…

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Escribí el otro día que no tardaría tanto en volver a pasar por aquí y efectivamente así ha sido. Esta noche he soñado. No acostumbro a recordar los sueños y menos a escribir sobre ellos pero el de hoy ha sido especial y me ha recordado a otro que tuve hace ya muchos años, mientras opositaba.
Esta noche una tormenta había arrasado una ciudad como me siento yo ahora, con todo alrededor patas arriba. Creo que es una metáfora. Al contrario, hace unos 10-15 años soñé que estaba escalando una cascada y llegué arriba. Eso fue unos días después de haber aprobado mi primer examen de registros. Realmente eso era una cascada!!! porque luego todo cayó como el agua pero relaciono dos sueños extraños en dos momentos vitales diferentes entre sí pero significativos. Hace unos años me sentía realizada; ahora, al contrario, todo está arrasado y nadie lo reconstruirá.

Y por algún motivo que desconozco mi subconsciente me ha traído a la memoria dos recuerdos, también dispares en el tiempo pero con algo en común aunque nada tienen que ver con el sueño… Hace años estaba en urgencias y había una pareja de gente mayor; él la abrazaba y yo sentía que ese abrazo era para mí, como si lo estuviese sintiendo en mi piel… hace unos pocos días, mientras esperaba en el coche, dos jovencitos se abrazaban en la acera mientras se besaban apasionadamente. Otra vez volví a sentir lo mismo de aquella vez: el beso y el abrazo, ya que los estaba viendo, eran para mí. Entre sueños y subconscientes anda la cosa… feliz fin de semana!

Vaya, cuánto tiempo sin pasar por aquí. La verdad es que mi blog ha caído casi en el baúl de los recuerdos o en el site del olvido.
No es que no tenga cosas que contar; es que me las explico a mí misma últimamente.
Ya hace meses que me siento extraña, no sólo por el tema salud sino por tener esa rara sensación de haber dejado mi vida en stand-by para volver a iniciarla más adelante aunque yo sé que no es así.
Necesito cambios; no alocados sino organizados. Necesito alejarme de esta isla que me apretuja y volver a disfrutar de un ambiente rico en estímulos. La cuestión es si el trabajo no me lo permite, ¿cómo lo voy a hacer? Si fuese hippy lo tendría más fácil; simplemente desaparezco y ya volveré o no pero como no lo soy, tengo que intentar organizar desde la nada. Y la nada, a menudo, aterra.
De momento, a dedicarme a la UOC. Es divertido esto de volver a estudiar. Las nuevas tecnologías son una auténtica maravilla; pensar que hace casi 20 años que acabé en la universidad y ahora ya nada es igual. Bueno, algo sí, sigue siendo necesario memorizar pero ahora ya no hablo de ius ni de «nihil volitum nisi praecognitum» sino de abreviaturas como PCPA -para-cloro-fenilalanina- si no recuerdo mal y otras similares, AMPAs sin que tengan que ver nada con asociaciones de madres y padres de alumnos, etc… En la variedad está el gusto, así que a variar ahora que se puede… buenas noches y espero volver antes de que pase mucho tiempo.

Fin de verano, como cada año pero éste, algo extraño. Se me acabó el paro, que no es poco. He pasado a ser una excluida de la sociedad aunque con ciertos privilegios, que no durarán eternamente pero tampoco eternamente voy a durar yo ;-).

Proyectos en mente: varios, como siempre. De momento, empezar psicología en la uoc. A ver qué surge después… Con la mente puesta en volver a Barcelona o no… eso lo dirá la suerte, el destino, el futuro… quién sabe quién hay detrás del ¿azar?, que nos coloca donde y como quiere.

Trabajo poco, bajo mínimos. Cada día más vaga. Lecturas a raudales. ¡Qué bien lo paso! Hay que reconocerlo. Nunca había tenido tanto tiempo libre para dedicar al ocio. La temporada de conciertos a la vuelta de la esquina. Será bueno poder acabarla y esperar con impaciencia otra y otra…

Las cargas familiares son eso: CARGAS y gordas. ¡quién pueda librarse de ellas! porque sino, serán ellas quienes se libren de mí, a medida que la salud se resiente. De momento, con revisión pendiente en breve. Diría yo que al 99% de mis capacidades… veremos qué nos depara el futuro… de momento, a seguir el día a día y a dormir, que pasado el calor veraniego, no es poco placer.